Los teléfonos “inteligentes” o smartphones se han convertido en parte esencial de nuestras vidas, sin los cuales, muchos de nosotros estaríamos perdidos. Muy lejos quedaron ya aquellos pesados “ladrillos” de antenas extensibles y el juego de la serpiente. Dispositivos que, aunque muy limitados tecnológicamente, resultaban irrompibles y contaban con baterías casi infinitas. Los tiempos cambian, y ahora podemos hacer casi de todo con nuestros teléfonos móviles. Sin embargo, todos estos avances traen consigo algunas desventajas. Y es que cada vez somos más vulnerables a la violación de nuestra intimidad y a ser víctimas de hackeos y/o estafas que provienen, sobre todo, del país que dirige Vladímir Putin.
Phishing y bluesnarfing: ¿en qué consisten las tácticas favoritas de los piratas informáticos?
Los hackers siempre encuentran nuevas y más originales formas de acceder a lo que más les interesa: nuestra información. Y con la llegada de los smartphones, lo cierto es que se lo hemos puesto “a huevo”. El objetivo de estos ciberdelincuentes es acceder a nuestras contraseñas, cuentas de correo electrónico o de redes sociales con el fin de “secuestrarlas” y exigir un rescate a cambio de su liberación. En muchos casos, esta información es vendida a terceros para realizar estudios de consumo. Te sorprendería saber cuantas grandes marcas adquieren estos datos obtenidos de manera ilegal. Para alcanzar este objetivo, los hackers utilizan la conocida táctica del phishing, que consiste en engañar al usuario para que este le facilite los tan preciados datos.
Sin embargo, en los últimos tiempos la tendencia ha comenzado a virar hacia otra técnica más sofisticada, pero de igual eficacia: la llamada bluesnarfing. Para realizar este hackeo, el ciberdelincuente necesita que la víctima tenga activado el bluetooth de su móvil. Además, solo podrá realizarlo si se encuentra dentro del radio del dispositivo, que por lo general suele ser de 15 metros aproximadamente. Estos requisitos hacen que este tipo de estafas se den con frecuencia en cafeterías o restaurantes sin que nos demos cuenta. Lo normal, es que para emparejar ambos dispositivos se pida una autorización. Sin embargo, los hackers utilizan programas informáticos por los cuales pueden acceder a nuestro dispositivo de forma directa.
Cómo evitar el bluesnarfing: esto recomiendan los expertos en ciberseguridad
Para evitar ser víctima de bluesnarfing, tanto la OCU (Organización de Consumidores y Usuarios) como el INCIBE (Instituto Nacional de Ciberseguridad), aconsejan mantener la conexión bluetooth de nuestros dispositivos apagada en todo momento. Y solo activarla en el momento que tengamos que usarla. De este modo evitaremos que los hackers tengan acceso permanente a nuestra información más sensible. Si crees poder haber sufrido este tipo de engaños, estas son algunas de las claves que pueden ayudarte a saber si has sido víctima de bluesnarfing:
- Comportamiento extraño del dispositivo: si el móvil se bloquea solo o ves acciones que tú no realizaste.
- Conexión desconocida en el historial de tu bluetooth: revisa este historial para localizar contactos con el que no recuerdas haber establecido conexión.
- Consumo excesivo de batería: si tu móvil experimenta un aumento en el consumo de su batería de forma repentina, podría ser que se estén produciendo una acción sospechosa en segundo plano.
Actividad sospechosa en las cuentas de tus apps: inicios de sesión no reconocidos, compras que no has autorizado o cualquier otro movimiento sospechoso