Las bajas laborales es algo que ningún trabajador quiere, sin embargo, si se producen, ya sea por enfermedad, accidentes en el trabajo o durante el trayecto de ida y vuelta, el trabajador tiene derecho a percibir una cuantía mientras dure dicha baja. Cuando hablamos de incapacidad temporal, nos referimos a aquella situación en la que el trabajador no puede desempeñar su desempeño habitual por causas de enfermedad o lesión. Normalmente, no son periodos largos, aunque a veces pueden prolongarse durante meses, en los que el trabajador deberá someterse a inspecciones periódicas en la mutua. Una vez el médico encargado crea que el empleado vuelve a estar apto, este se reincorporará a su puesto de trabajo.
¿Cómo la baja temporal puede convertirse en incapacidad permanente?
La duración de una incapacidad temporal dependerá del tipo de lesión o enfermedad y el tiempo de recuperación del paciente. Por lo general, las bajas laborales pueden llegar a tener una duración máxima de 12 meses. Si después de pasar un año, no se ha producido el alta porque el paciente aún no esté recuperado, se aplicará una prórroga de 6 meses. Si aún pasado este tiempo, el trabajador siga sin poder incorporarse a su puesto, lo cual sería un caso excepcional, se le concederá una segunda prórroga de 6 meses hasta alcanzar un total de 2 años de baja. Este supuesto es muy raro y solo se da en los casos en los que el trabajador hubiera sufrido una lesión muy grave o su enfermedad no remita.
Llegados a este punto, puede darse la situación de que el empleado, tras haber transcurrido 24 meses desde que se dio de baja, y aun así no se recupera, puede pedir la incapacidad permanente ante el Instituto Nacional de la Seguridad Social. Si esto sucediera, podrían darse tres posibles escenarios: Que la que petición sea rechazada por el INSS, lo que significaría la reincorporación inmediata al trabajo. Que se reconozca la incapacidad permanente, lo que le daría derecho a cobrar una pensión al no poder realizar más sus tareas habituales. Y por último, que el Instituto Nacional de la Seguridad Social decida extender la baja laboral durante un tiempo determinado. Esto solo ocurre cuando el tribunal médico estima que el trabajador se va a recuperar en un corto plazo.
¿Quiénes pueden pedir la baja laboral?
Cualquier trabajador, ya sea por cuenta ajena o autónomo, puede darse de baja temporal. Pero, si la persona no está dada de alta en la Seguridad Social, no recibirá la cuantía que le corresponde, mientras incurre la incapacidad temporal. Las bajas laborales están pensadas para ofrecer una ayuda económica y médica a los empleados y autónomos mientras se recuperan de sus lesiones, sin embargo, es importante conocer los plazos y requerimientos para poder asegurarte de recibir los beneficios correspondientes. Pero, incluso, una incapacidad temporal puede derivar en una permanente llegada a cierto punto, lo que acarrea implicaciones importantes en el fututo del trabajador, tanto a nivel laboral como financiero.
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