El banco australiano que apostó por la IA y despidió a su plantilla se ve obligado a pedirles que vuelvan porque la ha liado parda

La expansión de la inteligencia artificial en el trabajo vuelve a encender las alarmas. Según recogió Daily Mail, una trabajadora del Commonwealth Bank (CBA) fue despedida después de entrenar al chatbot que debía apoyar la atención al cliente. “Sin darme cuenta, estaba entrenando a un chatbot que me quitó el puesto”, explicó. Sí, como lo lees.

Por qué el despido tras entrenar a un chatbot reabre el debate laboral

Sullivan no era una recién llegada: con 25 años en el CBA, uno de los “cuatro grandes” de Australia, participó en un proyecto tecnológico para perfeccionar “Bumblebee AI”. El objetivo era mejorar la atención al cliente automatizada, pero el desenlace fue otro: en julio, ella y otros 44 empleados fueron despedidos pese a los beneficios récord del banco.

Claves del caso:

  • Trabajadora de 63 años con 25 años de antigüedad en el CBA.
  • Encargada de crear guiones, probar respuestas y corregir a Bumblebee AI.
  • Despidos en julio: 45 afectados en total, incluida Sullivan.
  • Beneficios anunciados: 10.200 millones de dólares por parte del banco.

¿Sustituir a personas por un bot? La pregunta se impone cuando los resultados no acompañan.

Cómo funcionaba Bumblebee AI y por qué no estaba listo aún

La labor de Sullivan consistía en elaborar guiones, testear las respuestas del chatbot y tomar el control cuando fallaba ante consultas reales. Cada corrección alimentaba al sistema con su experiencia, haciéndolo “más humano”. Sin embargo, tras los despidos, el volumen de llamadas gestionadas por humanos aumentó: Bumblebee AI no estaba preparado para asumir la carga y se produjo un auténtico caos operativo.

Qué medidas tomó el Commonwealth Bank y qué decidió la trabajadora

El CBA reconoció el error. Un portavoz admitió que la evaluación para eliminar 45 puestos “no consideró adecuadamente todas las consideraciones comerciales relevantes, y debido a este error, los roles no eran redundantes”. Se ofreció recuperar los puestos, pero Sullivan rechazó la propuesta y optó por la indemnización, al considerar quebrada la confianza. Relató que se quedó en shock: “Simplemente sentimos que no éramos nada, que éramos un número”.

A continuación, se resume la secuencia de hechos principales del caso:

MomentoHecho clave
Meses previosSullivan entrena Bumblebee AI: guiones, pruebas y correcciones en vivo.
JulioDespidos: 45 afectados, pese a beneficios de 10.200 millones de dólares.
Tras los despidosAumentan las llamadas humanas; el banco admite el error y ofrece reingreso.

En consecuencia, la trabajadora eligió la indemnización al no ver garantías sobre su puesto original.

El debate público sobre inteligencia artificial, empleo y regulación en Australia

El caso llegó al Parlamento en un simposio organizado por el Consejo Australiano de Sindicatos (ACTU). Allí se defendió que las plantillas conozcan de antemano la introducción de IA en las oficinas y que se invierta en formación y recualificación para una “fuerza laboral resiliente y adaptable”. La idea es clara: la tecnología debe servir a la gente y no al revés. Por otro lado, el CEO del CBA, Matt Comyn, anunció una alianza con OpenAI para combatir el fraude y el cibercrimen. Vaya paradoja, ¿no?

Deja un comentario