Las subastas públicas ofrecen viviendas por debajo del mercado para quienes cuentan con ahorros. Requieren un depósito del 25% y Andalucía concentra 85 inmuebles.
La Seguridad Social ha sacado a subasta 359 viviendas en toda España con precios de salida desde 23.700 euros. Estas pujas se adjudican a la oferta más alta que iguale o supere el 60% del valor de tasación y, tras la adjudicación, hay cinco días para pagar el resto. ¿Para quién es interesante? Para quienes disponen de ahorros y buscan una alternativa al mercado convencional.
Dónde están las viviendas de la Seguridad Social y qué precios de salida tienen
Actualmente, hay inmuebles en prácticamente todas las comunidades autónomas, con Andalucía a la cabeza (85 en total), seguida por la Comunidad Valenciana y Castilla y León. El catálogo es variado: desde pisos pequeños en zonas urbanas hasta casas unifamiliares con parcela en entornos rurales.
A continuación, algunos ejemplos destacados de viviendas y precios de salida:
Ubicación | Tipo | Precio de salida |
---|---|---|
Torrevieja (Alicante) | Apartamento en urbanización La Siesta | 23.769 € |
Aller (Asturias) | Casa con terreno anexo | 34.917 € |
Premià de Mar (Barcelona) | Piso de 50 m² | 36.286 € |
San Fernando (Cádiz) | Dúplex con varias estancias | 43.989 € |
¿Buscas primera vivienda o inversión para alquilar? La diversidad de opciones permite ajustar expectativas: desde independizarse con presupuesto contenido hasta mudarse a un espacio más amplio y tranquilo.
Cómo funcionan las subastas de la Seguridad Social: depósitos, adjudicación y plazos
El proceso exige preparación. Para participar se debe realizar un depósito del 25% del precio inicial. La adjudicación se concede a la oferta más alta que iguale o supere el 60% de la tasación y, una vez adjudicada, el comprador dispone de cinco días para abonar el resto del importe. Nada de dejarlo para el final: que no te pille el toro.
Antes de pujar, conviene tener claros los pasos clave:
- Realizar un depósito del 25% del precio inicial.
- La adjudicación va a la oferta más alta que iguale o supere el 60% del valor de tasación.
- Tras la adjudicación, hay cinco días para pagar el resto del importe.
- Comprobar si se subasta el pleno dominio o solo una parte de la propiedad.
En ocasiones, una misma vivienda puede estar dividida en varios lotes. Esto quiere decir que, para hacerse con el 100% del inmueble, habría que participar en todas las pujas correspondientes.
Qué revisar antes de pujar en estas subastas para evitar sorpresas caras
¿En qué fijarse para no pasarse de presupuesto? Además del precio de adjudicación, hay que calcular el coste total: impuestos, gastos de notaría, inscripción en el registro y, si hicieran falta, reformas para acondicionar la vivienda. Por otro lado, es esencial confirmar el derecho que se adquiere: pleno dominio, nuda propiedad o un porcentaje del inmueble, ya que esto puede limitar el uso efectivo de la casa.
En un mercado de alquiler cada vez más exigente (el esfuerzo de una pareja joven para un piso de 70 m² supera el 30% de sus ingresos en 17 capitales), estas subastas pueden ser una alternativa para quienes disponen del ahorro inicial necesario.