A pesar de que se espera una subida del IMV en 2026, con la posibilidad de ganar hasta 400 euros más para compensar el coste de la vida, el final de año llega con una revisión clave. Quienes no se ajusten a los límites de renta y patrimonio marcados por la Seguridad Social pueden despedirse de esta prestación. La Seguridad Social revisa en diciembre los ingresos de los beneficiarios del Ingreso Mínimo Vital, lo que puede suponer reducir, suspender o incluso reclamar la devolución de la ayuda a partir de 2026 para quienes ya no cumplan los requisitos.
Revisión anual del Ingreso Mínimo Vital y cruce de datos con Hacienda
Las condiciones económicas de las familias pueden cambiar en cualquier momento y el Instituto Nacional de la Seguridad Social lo tiene muy en cuenta. Para comprobar que se siguen cumpliendo los requisitos del IMV, el organismo cruza los datos con Hacienda y revisa la información de toda la unidad de convivencia.
Estas comprobaciones se realizan durante el mes de diciembre, pero el efecto práctico llega después: si se detecta que se han superado los ingresos o la renta mínimos, se dejaría de cobrar el Ingreso Mínimo Vital desde el 1 de enero de 2026. ¿Qué pasa entonces si tu situación ha mejorado más de lo previsto durante el año?
La declaración de la renta se convierte en una herramienta esencial. La Seguridad Social exige que los beneficiarios presenten su declaración en cada campaña de la renta anual de Hacienda. En función de los cambios que se declaren, tanto del titular como de la unidad de convivencia, la prestación puede reducirse, modificarse o incluso suspenderse.
Motivos por los que la Seguridad Social puede quitar el Ingreso Mínimo Vital
Los beneficiarios que no cumplan los requisitos dejarán de recibir el IMV y, en algunos casos, tendrán que devolver el dinero cobrado de forma indebida. Esto puede ocurrir si se superan los límites de renta, si se recibe una herencia que cambia la situación económica o si se han percibido importes que no correspondían.
A continuación se resumen algunas de las situaciones que la Seguridad Social tiene en cuenta al revisar el Ingreso Mínimo Vital:
- Superar los ingresos y la renta mínimos, recibir una herencia, declarar cambios en la unidad de convivencia, mantener o reducir los ingresos o entrar en situación de vulnerabilidad sobrevenida
En los casos en los que se haya cobrado IMV sin cumplir ya los requisitos, la Seguridad Social puede reclamar la devolución de la cuantía percibida. De hecho, recuerda la importancia de saber cómo actuar si exige devolver el ingreso mínimo vital. Además, solo algunas ayudas son compatibles, como una prestación de hasta 115 euros al mes para familias.
También puede haber errores administrativos. El IMV puede modificarse o retirarse por error a personas que sí cumplen las condiciones. Por eso se aconseja comunicar cualquier cambio, incluso una subida de la cuantía que no corresponda, para evitar problemas futuros como la devolución de dinero. Si se cobra menos o se pierde la prestación por una situación de vulnerabilidad sobrevenida, se puede solicitar un reajuste desde la sede electrónica.
Cómo influyen los cambios de ingresos en la cuantía del Ingreso Mínimo Vital
El beneficiario deja de cobrar el Ingreso Mínimo Vital cuando los ingresos de la unidad familiar superan el límite máximo de renta en 2025. En ese caso, la Seguridad Social envía una notificación explicando que se ha perdido el derecho a la prestación y suele indicar los motivos concretos. También recuerda que hay una edad máxima para cobrar el IMV y un tiempo de concesión determinado.
Cuando los ingresos aumentan, no siempre se pierde la ayuda, pero sí puede reducirse. No es raro seguir cobrando el IMV con una cuantía más baja y, si se ha recibido más de lo que correspondía, la Seguridad Social puede reclamar el cobro indebido e incluso descontarlo de las nóminas. Por otro lado, quienes mantienen el mismo nivel de ingresos continúan cobrando la misma cuantía, a la que se suma la subida prevista, con estimaciones de hasta 400 euros más en 2026.
Para entender de forma clara cómo afectan las distintas situaciones a la prestación, se puede resumir así:
| Situación de la unidad de convivencia | Efecto sobre el Ingreso Mínimo Vital a partir de 2026 |
|---|---|
| Superar el límite máximo de renta en 2025 | Se deja de cobrar el IMV desde el 1 de enero de 2026 tras la notificación de la ayuda |
| Aumentar los ingresos sin superar el límite de renta | Se sigue cobrando el IMV, pero con una cuantía mensual más baja |
| Mantener el mismo nivel de ingresos que el año anterior | Se mantiene la prestación y se suma la subida prevista de hasta 400 euros |
| Tener menos ingresos y situación de vulnerabilidad sobrevenida | La Seguridad Social aumenta la prestación y puede abonar una paga extra por retrasos |
En resumen, el IMV no desaparece para todos, pero sí para quienes ya no cumplan las condiciones. Más vale tener los papeles al día que llevarse un susto después, porque la Seguridad Social controla cada euro y cada cambio de situación.







