La pensión de jubilación no contributiva permitirá retirarse a los 65 años sin reunir 15 años cotizados, siempre que se carezca de ingresos suficientes y se tenga residencia en España.
Desde 2026, la Seguridad Social abre la puerta a jubilarse a los 65 años a quienes no alcanzan los 15 años cotizados o, teniéndolos, no logran derecho a la pensión contributiva. En estos casos entra en juego la pensión de jubilación no contributiva, una prestación asistencial para personas que llegan a la edad de jubilación sin pensión y con pocos recursos económicos.
Requisitos para jubilarse a los 65 años con pensión de jubilación no contributiva en la Seguridad Social
¿Quién puede acogerse a esta jubilación cuando no llega al mínimo de cotización? Según la Ley General de la Seguridad Social y el Real Decreto-ley 1/2025, se puede acceder a la pensión de jubilación no contributiva incluso sin haber cotizado ni un solo día, siempre que se cumplan las condiciones exigidas.
A diferencia de la pensión contributiva, cuya edad de jubilación depende de las cotizaciones y de lo previsto en la Ley 27/2011, la jubilación no contributiva mantiene la edad de acceso fija en 65 años y no se ve afectada por el aumento progresivo.
En la práctica, esta prestación se dirige a quienes llegan a la edad de jubilación sin pensión contributiva y sin ingresos suficientes. Para solicitarla será necesario, como mínimo, lo siguiente:
- Tener 65 años cumplidos y no tener derecho a una pensión contributiva de jubilación, por contar con menos de 15 años cotizados o no reunir los requisitos de esa modalidad.
- Haber residido en España 10 años entre los 16 años y la fecha de la solicitud, de los cuales al menos 2 deben ser consecutivos e inmediatamente anteriores.
- Carecer de ingresos económicos suficientes: el límite está en 7.905,80 euros anuales en 2025 y se prevé que suba hasta 8.801,80 euros en 2026, aumentando cuando se convive con más familiares.
La Seguridad Social ofrece esta prestación en forma de «ayuda asistencial», para evitar que quienes han alcanzado la edad de jubilación sin derecho a pensión contributiva y con carencia de rentas se queden totalmente sin ingresos.
Cuantías de la pensión de jubilación no contributiva en 2025 y previsión de subida para el año 2026
La cuantía de la pensión de jubilación no contributiva no es igual para todas las personas, ya que depende de las rentas del solicitante y de su unidad económica de convivencia. Puede reconocerse en su importe íntegro o reducirse hasta la cuantía mínima del 25 %.
En 2025, la cuantía íntegra se sitúa en 7.905,80 euros al año, que son 564,70 euros al mes en 14 pagas. La cuantía mínima, correspondiente al 25 %, queda en 141,18 euros mensuales.
Para 2026 se espera una mejora: la cuantía íntegra podría alcanzar los 8.801,80 euros anuales, 628,7 euros al mes, es decir, 64 euros más cada mes que en 2025. La mínima se situaría en 157,17 euros mensuales y también existe la modalidad de íntegra más el 50 %, con cuantías superiores, aunque se trata todavía de datos orientativos.
Las principales cuantías mensuales se resumen así:
| Tipo de pensión no contributiva | 2025 (mensual) | 2026 (mensual, datos orientativos) |
|---|---|---|
| Íntegra | 564,70 € | 628,7 € |
| Mínima del 25 % | 141,18 € | 157,17 € |
| Íntegra más el 50 % | 847,05 € | 943,05 € |
Si estas cifras se confirman, en 2026 la pensión íntegra y sus complementos subirán, lo que dará un pequeño respiro a quienes dependen por completo de esta ayuda, que no está nada mal para quienes, de otro modo, se quedarían sin nada.
