El caso de Linus Puchal reabre el debate sobre la manipulación de matrículas: sanciones de hasta 200 euros y posible recurso si se actúa a tiempo.
El verano pasado, un conductor barcelonés decidió cubrir la “E” de España de su matrícula con un adhesivo azul de “CAT”. La broma le ha costado cara: cuatro meses después, la notificación oficial confirma una multa de 200 euros. ¿Por qué es importante? Porque miles de automovilistas circulan con placas alteradas sin saber que se exponen a la misma sanción.
Alterar la matrícula del coche es infracción grave según el Reglamento General de Vehículos
Manipular cualquier elemento que impida leer la matrícula, ya sea pegatinas, tornillos mal colocados o láminas tintadas, está catalogado como infracción grave. La norma exige que las placas sean “perfectamente legibles” y mantengan las dimensiones y símbolos oficiales. Sustituir o tapar la “E” por “CAT”, “GZ” o cualquier distintivo local puede considerarse alteración de un documento público, de ahí la sanción económica.
En el caso de Puchal, la Guàrdia Urbana lo detectó además circulando por el carril bus de la Gran Vía. Resultado: una multa por vía restringida y otra por la matrícula. Lo cierto es que Tráfico ve en estas placas modificadas un problema de identificación para radares y cámaras.
Cuánto puede costar tapar la letra de la matrícula y cómo reducir la sanción un 50 %
A continuación se resume el castigo económico más habitual y la posible rebaja por pronto pago:
| Concepto de la infracción | Importe habitual | Descuento si se abona en 20 días |
|---|---|---|
| Alterar o manipular matrícula | 200 € | 100 € |
| Circular por carril reservado (ej. bus/taxi) | Hasta 200 € | Hasta 100 € |
Pagar en los primeros veinte días naturales implica reconocer la responsabilidad y cierra la vía al recurso administrativo. Por tanto, conviene valorar si merece la pena reclamar antes de acogerse a la rebaja.
Antes de lanzarte a pagar, conviene saber que existen precedentes favorables, como la sentencia que eximió al político gallego Bieito Lobeira por cubrir la “E” con “GZ”. ¿Te preguntas qué hacer? Sigue estos pasos:
- Revisa la notificación completa y comprueba datos: matrícula, lugar, hora y precepto infringido.
- Solicita las pruebas fotográficas en la jefatura o sede electrónica correspondiente.
- Prepara un escrito de alegaciones en el plazo de 20 días hábiles.
- Aporta jurisprudencia: menciona resoluciones donde tribunales anularon sanciones similares.
- Entrega el recurso de forma telemática o presencial y guarda el justificante.
Si Tráfico desestima la alegación, todavía queda la vía contencioso‑administrativa, aunque exige abogado y procurador.
Cómo evitar multas por pegatinas en la matrícula que parecen inofensivas
¿Eres de los que personaliza el coche con vinilos? Tal vez convenga pensárselo dos veces:
- El reglamento no prohíbe adornar el coche, pero sí todo lo que dificulte la correcta lectura de la placa.
- Las cámaras de peaje y radares de velocidad se basan en la identificación automática; si fallan, la sanción es casi segura.
- Adhesivos promocionales o símbolos regionales deben colocarse fuera de la matrícula, nunca sobre la banda azul.
De hecho, la Dirección General de Tráfico recuerda que las matrículas con banda europea entraron en vigor en 2000 y ninguna norma permite su modificación parcial. Por consiguiente, cualquier adhesivo que cubra la “E” supone vulnerar el formato oficial.
¿Qué dice exactamente la legislación vigente sobre la visibilidad de las placas de matrícula?
El artículo 25 del Reglamento General de Vehículos establece que «las placas de matrícula deberán mantenerse limpias y en perfecto estado de lectura». No menciona explícitamente las letras del país, pero sí prohíbe “obstáculos que impidan o dificulten” su identificación. De ahí que la interpretación quede en manos de los agentes y, en última instancia, de los tribunales.
En consecuencia, hay margen para el recurso cuando el adhesivo no impide la lectura numérica. Sin embargo, casos como el de Puchal demuestran que la Administración suele aplicar la sanción de forma automática.
Cubrir la “E” con “CAT” puede parecer un simple gesto de reivindicación, pero el bolsillo se resiente: 200 euros de multa que solo bajan a 100 euros si se paga pronto. ¿Vale la pena el riesgo? Tú decides, aunque la ley es clara: la matrícula debe verse tal cual salió de la fábrica.