Cuando el termómetro aprieta, lo último que apetece es pelearse por un hueco en la arena. Por eso, cada vez más gente está optando por alquilar piscinas privadas por horas para darse un baño con calma y privacidad. La mecánica es simple: eliges una piscina cercana, reservas unas horas y te olvidas de las aglomeraciones. Vanesa Sánchez, vecina de Mora (Toledo), se ha sumado este verano alquilando la piscina de su vivienda cuando no la usa. Dice que fue una decisión práctica y también económica, y que la experiencia le está saliendo redonda. En general, los precios se mueven entre 20 y 25 euros por hora y las franjas más habituales van de 2 a 5 horas.
¿Por qué está de moda alquilar piscinas privadas por horas?
En plena ola de calor, la propuesta es clara: refrescarse sin colas, sin miradas y sin ruidos de fondo. La opción de reservar un espacio privado permite evitar multitudes y ganar intimidad, algo que muchos ya valoran más que un parque acuático.
Además, no hace falta tener una casa de lujo para disfrutar de un chapuzón tranquilo. Con unos clics, cualquiera puede encontrar un “oasis” a pocos kilómetros de casa y adaptarlo a su horario, su presupuesto y su número de acompañantes.
Cómo reservar y cuánto cuesta
La dinámica es directa y sin rodeos. Desde la web de la plataforma, el usuario busca piscinas por localidad o provincia y accede a fichas con fotos, características del espacio (sombras, mobiliario, acceso al baño), precio por hora y número máximo de personas permitidas. ¿Cómo se cierra la reserva?
- Elige una piscina cercana tras revisar fotos y características.
- Selecciona fecha y tramo horario; las franjas más comunes son de 2 y 5 horas.
- Reserva directamente desde la web usando los métodos de pago disponibles.
- Habla con el anfitrión para ultimar detalles mediante la comunicación directa que facilita la plataforma.
Tras estos pasos, tocaría disfrutar. Por lo general, el precio oscila entre 20 y 25 euros por hora y, en la mayoría de los casos, se exige un mínimo de horas por reserva; por tanto, conviene cuadrar bien el tramo que más te encaje para que el bolsillo no se enfade.
El negocio de Vanesa en Mora (Toledo): así le va
Vanesa decidió aprovechar su piscina cuando ella está trabajando por las tardes: «Trabajo muchas tardes en verano, y me daba pena que la piscina estuviera cerrada. He invertido mucho dinero en ella, y pensé: ¿por qué no alquilarla cuando no la estoy usando?» Un anuncio, un rato de configuración y listo: «Un día vi una publicidad de esta plataforma, me informé, y la verdad es que es muy sencillo. Solo tienes que subir fotos, indicar los horarios y el precio, y empezar a recibir reservas».
Desde que arrancó, asegura que la experiencia ha sido positiva y tranquila: «La gente es muy respetuosa. No suelo estar en casa cuando vienen, porque el acceso a la piscina es independiente, por una calle paralela». Cuenta que los usuarios entran, disfrutan y la avisan cuando se van; incluso le envían vídeos para mostrar cómo dejan todo.
Entre los visitantes ha tenido familias, parejas y personas que necesitan privacidad por motivos culturales. Vanesa relata una reserva significativa: «Vinieron unas chicas musulmanas y me dijeron que hay piscinas públicas donde no se pueden bañar o no se sienten cómodas, por eso alquilaron la mía» y añade: «Querían un sitio íntimo donde poder bañarse tranquilas, sin miradas. Me pareció muy bonito poder ofrecerles eso». También subraya que no ha habido fiestas ni celebraciones: «En mi caso, todo ha sido muy tranquilo. Familias que vienen con niños, parejas que quieren estar solos… Todos han sido muy respetuosos. Hasta ahora no he tenido ni una mala experiencia».
¿Qué verás en cada anuncio antes de reservar?
Antes de pagar, la plataforma muestra información útil para que elijas con calma: fotos, condiciones del espacio y límites de aforo. Así sabes de antemano si te compensa y si encaja con tu plan de tarde o de mañana.
Aspecto | Lo que incluye o muestra |
---|---|
Fotos del espacio | Imágenes de la piscina y zonas alrededor |
Características del espacio | Sombras, mobiliario, acceso al baño, entre otros |
Precio por hora | En general, entre 20 y 25 euros por hora |
Número máximo de personas permitidas | Indicado en cada ficha |
Franja de alquiler habitual | Tramos de 2 y 5 horas |
Extras posibles | Algunas piscinas incluyen nevera, zona de barbacoa y utensilios de cocina |
Métodos de pago | Distintos métodos disponibles en la web |
Comunicación con el anfitrión | Directa, sencilla y clara |
En consecuencia, la reserva se hace con bastante transparencia: puedes comparar de un vistazo lo que ofrece cada anfitrión y elegir en función de tu presupuesto, tus necesidades y tu tiempo disponible.
Sácale partido al verano sin complicaciones
Empieza buscando por tu localidad o provincia y revisa con detalle las fotos y las características del espacio. Después, decide con calma el tramo horario y comprueba el número máximo de personas permitidas; como la comunicación con el anfitrión es directa, puedes resolver dudas rápidamente antes de confirmar.
Ten presente que los precios suelen moverse entre 20 y 25 euros por hora y que la mayoría de anfitriones exige un mínimo de horas por reserva. Si tu prioridad es la privacidad o evitar aglomeraciones, esta alternativa encaja y, además, es flexible para distintas situaciones: familias, parejas o quienes necesitan un espacio íntimo.