La reciente adjudicación del servicio de grúa municipal de Sevilla a la empresa Setex Aparki ha desatado una fuerte polémica tras el despido 6 trabajadores en su primer día de operaciones. El hecho ha generado preocupación entre sindicatos y empleados, quienes denuncian que la empresa ha empezado su gestión con una medida que consideran arbitraria y represiva. El sindicato Confederación Nacional del Trabajo (CNT) ha denunciado que estos despidos tienen una intención antisindical. Según la organización, varios de los trabajadores afectados son afiliados al sindicato y habían participado activamente en la defensa de los derechos laborales. La CNT sostiene que la empresa busca debilitar cualquier resistencia sindical dentro del servicio de grúa municipal, eliminando a quienes podrían oponerse a eventuales recortes en sus condiciones laborales.
La adjudicación del servicio de grúa municipal de Sevilla está bajo sospecha
Ante esta situación, el sindicato ha convocado movilizaciones y exige la inmediata readmisión de los despedidos. También han anunciado que emprenderán acciones legales contra la empresa por vulneración de los derechos laborales. El problema no se reduce únicamente a los despidos. Desde el inicio del proceso de adjudicación, varias voces alertaron sobre los riesgos de otorgar el contrato a Setex Aparki. La empresa ganó la concesión con una oferta de 7,5 millones de euros por tres años, lo que significaba una rebaja del 25% respecto al presupuesto estimado inicialmente.
Esta oferta tan baja fue calificada por la CNT y otros expertos como una “oferta temeraria”, lo que implica que, para que la empresa logre tener rentabilidad, podría recurrir a medidas como la reducción de personal, el empeoramiento de las condiciones laborales o incluso el incumplimiento de algunas cláusulas del contrato. De hecho, según informan fuentes sindicales, Setex Aparki ya ha mostrado comportamientos similares en otras ciudades. En Santiago de Compostela, la empresa fue condenada a pagar cerca de 700.000 euros al ayuntamiento tras incumplir los términos de su contrato en el servicio de la ORA y la grúa municipal. Esto ha hecho que en Sevilla muchos se pregunten si la compañía podrá garantizar un servicio de calidad sin incurrir en irregularidades.
¿Qué papel juega el Ayuntamiento de Sevilla todo esto?
El Ayuntamiento de Sevilla, liderado por el alcalde popular Jose Luis Sanz, se encuentra en el centro de las críticas. A pesar de las advertencias sobre los antecedentes de Setex Aparki y la baja oferta presentada, el Consistorio decidió adjudicar el contrato sin establecer mecanismos de control efectivos para evitar incumplimientos. Ahora, ante el despido de los trabajadores, el ayuntamiento guarda silencio y no ha tomado medidas concretas para garantizar que la empresa respete el contrato y los derechos laborales de su plantilla. Esta falta de respuesta ha generado indignación entre los sindicatos y la oposición política, quienes exigen que se revise la concesión y se tomen acciones para revertir los despidos. La situación sigue evolucionando. La CNT ha anunciado que continuará con las movilizaciones y las acciones legales, mientras que los trabajadores despedidos buscan respaldo en otras entidades sindicales y en la opinión pública.
