La Inspección de Trabajo de la Generalitat ha sancionado a Extreme Works, subcontrata de las obras del Camp Nou, por emplear durante meses a 79 trabajadores turcos sin permiso en regla y reaccionar con despidos cuando intentaron regularizar su situación.
El organismo, dependiente de la Generalitat de Catalunya, ha acreditado que estos 79 empleados procedentes de Turquía han trabajado sin los permisos necesarios en la remodelación del estadio. La investigación se abrió el 25 de septiembre tras una denuncia de CCOO y concluye con una sanción muy grave y una multa de 1,09 millones de euros para Extreme Works, que desde luego no es poca cosa.
Inspección de Trabajo acredita 79 empleados turcos sin papeles en el Camp Nou
Extreme Works, una de las subcontratas que operan en el Camp Nou, reconoce haber recibido la notificación y se limita a afirmar que “La estamos analizando con nuestro equipo jurídico”. La resolución desmiente la versión que venía manteniendo la compañía, que hablaba solo de “unos pocos” trabajadores con documentación caducada o sin papeles.
La Inspección concluye que la práctica totalidad de los empleados traídos desde otros países por este grupo empresarial han trabajado sin autorización. Ante las quejas, la respuesta fue despedirlos y ofrecer a una parte regresar a Turquía.
Despidos, poderes notariales y trabajadores en limbo tras la sanción impuesta
Cuando los operarios acudieron a CCOO para tratar de regularizar su situación, la empresa empezó a despedirlos en varias tandas, coincidiendo las últimas con protestas del sindicato a las puertas del estadio. Paralelamente, un representante de Extreme Works acudió a una notaría del centro de Barcelona para que varios empleados sin permiso de trabajo firmaran poderes notariales con los que intentó regularizar su situación y esquivar la actuación inspectora.
Parte de esos 79 trabajadores ya ha regresado a Turquía, mientras otros siguen en Barcelona y alrededores a la espera de resolver su situación administrativa. Se habían alojado en pisos arrendados por la compañía y en hoteles de Calella. En el caso de quienes vivían en pisos, la empresa abonaba el alquiler, aunque la dirección ha avanzado que “empezarán a vaciar los apartamentos” y que se avisará a los propietarios de los inmuebles ocupados por empleados que han rechazado regresar.
Antes de cerrar el caso, conviene fijarse en la idea central que recorre todo el expediente:
- La Inspección de Trabajo de la Generalitat sanciona a Extreme Works con 1,09 millones de euros por emplear a 79 trabajadores turcos sin papeles durante meses en las obras del Camp Nou.
En definitiva, este expediente vuelve a poner el foco en las condiciones de quienes levantan grandes infraestructuras a través de cadenas de subcontratación. Y deja una pregunta clara sobre la mesa: cuando intervienen tantas empresas en una misma obra, ¿quién se asegura de que todo se haga de forma realmente legal?
