La ayuda mensual de 480 € se podrá agotar antes de lo previsto si no se acumulan las cotizaciones suficientes. El nuevo límite de corte sube a 66 años y 10 meses en 2026 y alcanzará los 67 años en 2027.
El Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) ha puesto fecha al primer gran ajuste del subsidio para personas mayores de 52 años. A partir de 2026, la prestación dejará de cobrarse cuando el beneficiario alcance la edad legal de jubilación, que sube progresivamente: 66 años y 10 meses en 2026 y 67 años en 2027. Quien no llegue a esa edad con los requisitos para una pensión podrá quedarse sin ingresos en los últimos meses. ¿Te afecta este cambio? Sigue leyendo.
Por qué el subsidio para mayores de 52 años cambia a partir de 2026, en paralelo al alza de la jubilación
El incremento de la edad de retiro responde a la reforma de pensiones emprendida por la Seguridad Social. De ahí que el SEPE “calque” la nueva barrera de jubilación para fijar la duración máxima del subsidio. Hasta ahora, la ayuda se podía percibir de forma ininterrumpida hasta la jubilación ordinaria. Con el cambio, la duración se frenará en la edad legal que marque el calendario anual.
Ojo: la cuantía (480 € al mes) y la cotización al 125 % de la base mínima se mantienen, pero el tiempo de cobertura será menor si no se eleva la carrera de cotización.
Evolución de la edad límite (años completos y meses)
Año | Edad legal de jubilación | Fin del subsidio de 52 años |
---|---|---|
2025 | 66 a 8 m | 66 a 8 m |
2026 | 66 a 10 m | 66 a 10 m |
2027 | 67 a 0 m | 67 a 0 m |
Antes de tomar decisiones, conviene revisar el historial laboral y calcular si se llega al mínimo para la jubilación anticipada. De lo contrario, podrían abrirse “meses en blanco” sin subsidio ni pensión.
Cómo afectará el nuevo límite de 66 años y 10 meses a los beneficiarios que sigan desempleados
Imagina que cumples 66 años en marzo de 2026, pero no llegas a las cotizaciones exigidas para retirarte antaño. Con las reglas vigentes, seguirías cobrando el subsidio. Con las nuevas, la ayuda se extinguirá al soplar las 66 velas y 10 meses, dejándote sin prestación hasta que alcances los 67 años (o completes cotización). Este “vacío” preocupa a sindicatos y asociaciones de parados, que reclaman medidas transitorias.
Por otro lado, quienes sí acumulen los años necesarios podrán solicitar la jubilación anticipada y enlazar sin huecos. Planificar la vida laboral, tanto en años como en bases, será más decisivo que nunca.
Requisitos imprescindibles para no perder la ayuda y llegar a la jubilación con cobertura completa
Conviene refrescar las condiciones, porque seguirán siendo las mismas… aunque bastará con descuidar una para quedarse fuera:
- Tener al menos 15 años cotizados, dos en los últimos quince.
- Acreditar 6 años de cotización por desempleo (paro contributivo).
- Ingresar menos del 75 % del salario mínimo interprofesional (SMI).
- Mantener la inscripción y la demanda de empleo activas en el SEPE.
¿Te sorprende algún requisito? ¡Toma nota! Un descuido al renovar la demanda puede suspender el pago o exigir reintegros.
Dónde y cómo solicitar el subsidio sin errores
El alta puede presentarse presencialmente en la oficina de prestaciones o por internet con certificado digital, DNI electrónico o [email protected] Es imprescindible adjuntar vida laboral, DNI, declaración de rentas y cualquier documento que acredite cotizaciones en el extranjero. El SEPE recuerda que la fecha de inscripción es la que fija el derecho: un día de retraso supone perder la mensualidad inicial.
Posteriormente, cada doce meses hay que renovar la declaración de rentas. Dejarla caducar suspende el subsidio y obliga a solicitar su reactivación, trámite que puede demorar el cobro varias semanas.
Consecuencias prácticas y consejos finales para evitar meses sin ingresos en la recta final
El endurecimiento no recorta la cuantía, pero sí el tiempo para sumar cotizaciones. Por tanto:
- Verifica tu vida laboral y proyecta cuándo alcanzarás la jubilación.
- Si te faltan años, plantéate cotizaciones voluntarias o convenios especiales.
- Mantén al día la demanda de empleo y la declaración anual de rentas.
En conclusión, la ayuda para mayores de 52 años sigue siendo un salvavidas, pero a partir de 2026 tendrá “fecha de caducidad” sincronizada con la jubilación ordinaria. Planificar los últimos años de carrera profesional será clave para no quedarse a la intemperie económica.